Diez años ha que el mago de las manos largas y los movimientos cadenciosos nos hizo la broma de hacer desaparecer en su galera a si mismo.
Sabiamente había regulado su entrega de sapiencia durante fructuosas décadas.
Debo agregar al jugoso artículo de Jorge Aníbal Cela algunos hechos no muy conocidos que protagonizó el poeta.
Festejó uno de sus aniversarios de nacimiento en el Museo Ernesto Che Guevara de Buenos Aires, calle Nicasio Oroño 458, Capital, y allí nos trajo a sus amigos, Oscar Cardozo Ocampo que interpretó al piano sus propias composiciones, Omar Moreno Palacios el chascomucense, con sus tres calandrias (hijas) que cuando Abrieron sus bocas encantaron a los presentes. Ya había presentado el poeta Hamlet allí en ese gran salón del barrio de Caballito que le era familiar uno de sus libros de poemas.
Había respondido a mi curiosidad muy francamente cuando le pregunté porqué tenía que venir hasta nuestro amplísimo pero modesto salón en un barrio algo lejano, para presentar su magnífica obra, siendo él comunista y teniendo el local central del partido en la Avda. Entre Ríos. Dijo “tuvimos diferencias y no me dan el local”. Ahí agregué a mi aprendizaje personal sobre la actitud de la izquierda argentina un dato más por la experiencia de un grande.
Habían hallado los huesos de Che Guevara y sus compañeros en Bolivia, y los enviaron a su Cuba (en la cuna de Ernesto la ciudad de Rosario de Santa Fé y en las demás provincias del país los argentinos habrán tenido un sueño incómodo). El poeta Lima Quintana tomó lápiz y papel y plasmó poéticamente la realidad histórica de esos pequeños ataúdes que trasladaron la historia sudamericana hasta la isla caribeña de Cuba.
“Cantata del Regreso” la tituló y así fue grabada y distribuída. La voz de Hamlet diciendo Los textos, la voz de Jairo cantando los versos y la música de Oscar Cardozo Ocampo Esculpiendo para la eternidad el sentimiento mundial de respeto, ante el hallazgo del Tesoro, que durante treinta años supieron enterrar los que odian y destruyen.
Le ofrecí personalmente al poeta el ámbito tan familiar para él del Museo Che Guevara de Caballito para estrenarla a puertas cerradas, solo con sus amigos y por mística la maravillosa obra.
Franca pero inocentemente me explicó…. “Toto pasa que me van a dar el Cine Gran Rex para Estrenarla” . Pensé para mí ¡ porqué creerá que le van a facilitar ese Cine ! pero el hombre Decidía. El tiempo lo vió estrenarla en Cuba, en la Plaza mayor de Santa Clara con todo el pueblo de esa ciudad como público reverente a las palabras de Hamlet, la voz de Jairo y el piano de Oscar Cardozo Ocampo. Los tres argentinos sobre el monumento grupo escultórico Ernesto Che Guevara que está sobre el Museo y Mausoleo que hoy conserva los restos de la Guerrilla pionera de los logros de Evo Morales. El poeta, el cantor y el pianista fueron acompañados Por la Orquesta Sinfónica Cubana de Santa Clara. En Buenos Aires nunca se pudo estrenar la Cantata, Hamlet enfermó y nos dijo … sigan solos ya les enseñé bastante.
Lo siguió en un accidente automovilístico Oscar Cardozo Ocampo. Jairo algún día lo escribirá, tal vez en sus memorias. Yo me adelanto por las dudas. El tiempo vuela y he comprobado en los últimos veinte años, que la mayoría esquivan hablar de lo incómodo. Del que no tiene museo en su ciudad natal, del que no tiene museo municipal en el puerto de Buenos Aires, aunque sea el ícono mundial de la ética, admirado y reverenciado en Cuba en la que está instalado por suerte para ellos como el inconsciente colectivo.
Eladio González toto director - Museo Ernesto Che Guevara de CABA-llito