.... para los que quieren mover el mundo / con su corazón solitario,/ los que por las calles se fatigan / caminando, claros de pensamientos;/ para los que pisan sus fracasos y siguen; / para los que sufren a conciencia, / porque no serán consolados / los que no tendrán, los que no pueden escucharme; / para los que están armados, escribo.
Rubén Bonifaz Nuño