José Muchnik
¡Año nuevo! ¿Feliz? ¿podemos pedir? ¿instantes? ¿horas?
¿un año entero de felicidad? imposible, agobiante, se imaginan trescientos
sesenta y cinco días de felicidad al hilo, autopista hacia el estado de
pelotudez absoluta. Vivir con gusto como las buenas salsas necesita
contrapuntos, lunas crecientes, menguantes, nostalgias, broncas, amores terremoto,
ternuras clavel… ¡Nuevo sí!, eso estaría bien, un año nuevo, aunque sea un
poquito nuevo…
Querido 2014:
Disculpa que tome el atrevimiento de escribirte
directamente, no pensaba hacerlo, ayer veintisiete de diciembre del 2013, 20 km
al sur de París donde resido hace más de treinta años (otro día te contaré esta
historia), estaba escuchando el noticiero de las 19h45’ en Arte canal 7, una
viejita en las calles de Budapest, hija muerta por error médico, queda sin
plata, no hace pié, el banco exige que venda la casa para pagar deudas, la casa
donde nació, ¿la bolsa o la vida?, el banco se lleva las dos, todo se repite;
los siete pecados capitales no dan abasto, están sobrecargados de trabajo. Te
escribo irónicamente, querido 2014, la tragedia es mucha, para qué entristecer
más este mensaje. Todo se repite, odios, armas de todo tipo, drones, machetes, bazucas,
bombas de fragmentación, minas personales, gases letales… Después de la viejita
de Budapest matanzas en África Central, Sudán del Sur, Siria…imágenes horrores
se suceden, Mundo show reality, luego entrevista a Giusi Nicolini,
intendenta de Lampedusa, aprendemos cosas, ahora sabemos dónde está Lampedeusa,
principios de octubre trescientos sesenta y seis cadáveres alineados, un solo
naufragio, algunos sobrevivieron, desnúdense, ahí, pónganse ahí, manguera,
chorro desinfectante a presión sobre la pobre gente desnuda tratando de cubrirse,
de salvar un resto de pudor como podían… estamos en Italia, mismas escenas en
Fuerteventura, Canarias España, en… Europa, cuna de civilizaciones, Mediterráneo,
muralla de agua, líquida necrópolis, noticias se evaporan, indiferencia derrota
sentimientos. Luego pantallazos breves, dos empresas quebradas, cientos de
desempleados, todas las Ferrari último modelo vendidas a poco más de un millón de
euros, pagaron ochenta y tres millones de dólares por un brillante rosa, las
ventas de Navidad…
Informaciones y carates me deprimen, por eso querido
2014, cuando terminó el noticiero me decidí a escribirte, catorce igual dos
veces siete; la suma 2+0+1+4 = 7; según las cábalas el número sabático es
propicio para los cambios. ¿Qué puedes traer de nuevo? no sé, inventá algo
¿para qué tantas nuevas tecnologías si en el fondo nada nuevo? la fatídica
repetición continúa, las agencias de notación y el exprimidor de gente
continúan, se toman el jugo y tiran las almas Aunque sea una
pequeña novedad…¿Una nanopintura anticorrupción?¿Un robot antigenocidas? ¿El
virus de la solidaridad? ¿te imaginas?... una pandemia de solidaridad, la
humanidad rebrota…Por ahora aquí en esta Tierra se acentúa la epidemia inversa,
te lo digo antes de que llegues para que sepas lo que te espera, en las crisis
buscan chivos expiatorios, los otros, la culpa es de los otros, inmigrantes,
gitanos, negros, judíos, árabes, turcos, sudacas…entonces vienen los salvadores
de la patria y de la fe, fascistas y cruzados de todo tipo, “Alba dorada” en
Grecia ¿cuna de la democracia? Frente Nacional en Francia ¿libertad igualdad
fraternidad?…
Si no fuese urgente no me hubiera tomado el
atrevimiento de escribirte ¿Qué dices? que ya debes entrar en funciones, que
Tiempo no admite prórrogas, que en cuatro días no puedes hacer milagros… Vení
con lo que tengas, un pan crocante, una mesa de roble, un jarra generosa…lo
nuevo no reside en los objetos sino en el aire que generan sus movimientos, lo
esencial la respiración y el aliento, de todos modos te esperamos, no necesitás
golpear, la copa estará servida, la poesía fresca, la esperanza entera, ¡Año
nuevo!, ¿Y la felicidad?, no te preocupes, ya la encontraremos en los pasadizos
de un sueño.
29-12-2013